La caducidad de los huevos es un tema recurrente en las reuniones familiares. Unos te dicen que mires el código que tienen grabado, otros que los huevos que flotan están caducados y tu abuela te dirá que los huevos no tienen fecha, que eso es una tontería. En Visto en el Super os damos todas las claves para conocer la caducidad de los huevos.
¿Cuál es la fecha de caducidad de los huevos?
Para evitar el desperdicio alimentario hay que conocer la diferencia entre fecha de caducidad y consumo preferente.
La fecha de caducidad indica que a partir de ese momento el producto, normalmente carne y pescados, ya no es seguro. El consumo preferente es orientativo, te avisa que a partir de la fecha el producto podría haber perdido propiedades, pero si se ha almacenado correctamente se puede comer sin problema. Por ejemplo, no deberías comer sushi pasada la fecha de caducidad porque corres el riesgo de que tenga bacterias patógenas. Por el contrario si te comes un yogur pasada la fecha no tendrás ningún problema, sobre todo si está bien almacenado en la nevera.
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Conservar los huevos correctamente
No solo es importante conocer la fecha de caducidad de los huevos o su consumo preferente sino también conservarlos bien.
Una de las dudas que tiene la gente es porque compramos los huevos a temperatura ambiente y al llegar a casa los guardamos en la nevera. Los huevos necesitan un sitio fresco, seco y con una temperatura constante. Los supermercados cumplen esos requisitos: en verano hay aire acondicionado y en invierno tienen una temperatura estable, y por eso no los meten en las neveras, ya que estarían demasiado fríos.
Pero nuestra cocina es otro cantar. Si no los metemos en la nevera, la fecha de caducidad se dispararía porque nuestra cocina sufre muchísimos cambios de temperatura, sobre todo al cocinar o de la misma calefacción. Por eso se recomienda meterlos en la nevera, en la zona con una temperatura más estable.
Las precauciones se deben incrementar en verano ante el riesgo de sufrir intoxicaciones como la salmonela, muy comunes cuando se preparan mayonesas caseras.
Otro truco para mantener los huevos en perfecto estado es no lavarlos. Si los vamos a meter directamente en la nevera no hay que lavarlos ya que les quitamos la protección natural que tienen. Si se elimina la protección, el huevo está más expuesto a bacterias. También es importante tenerlos tapados en una huevera, para no estar en contacto con alimentos que pueden caducar a su alrededor.
El truco de los huevos que flotan
Para conocer la caducidad de los huevos hay un método que no falla y es la ciencia. El truco de los huevos que flotan para saber si se pueden comer o no es muy sencillo. Solo hay que introducir un huevo en un recipiente con agua, si el huevo se va al fondo, está fresco. Si al contrario, empieza a flotar estamos ante un huevo caducado.
La cáscara es una superficie porosa que intercambia gases con el exterior. Conforme pasan los días, el huevo pierde humedad, que se escapa a través de esos poros. La clara y la yema se van encogiendo y en su interior se queda un vacío, una cámara de aire que hace que los huevos floten al meterlos en agua.
Como podéis ver, hay distintas formas de comprobar la caducidad de los huevos. Aunque como siempre, ante cualquier duda que tengáis lo mejor es descartar un huevo que no os de confianza.
Una de las mejores soluciones es sin duda hacer la compra de manera organizada: nos da la posibilidad de no desperdiciar alimentos y además ayuda a nuestro bolsillo y al medio ambiente.
